Wednesday, October 16, 2013

La banalización de la RSE

Hace unos 20 años, cuando comencé con esto de la ética empresarial y la responsabilidad social de la empresa, había que empujar un concepto nuevo, poco difundido en Argentina, que marchaba a contramano de la teoría económica y de las concepciones sobre las relaciones entre empresa y sociedad, esas que modelaban la opinión pública en la década del 90 en Argentina.
Luego de casi una década, de regreso al país en 2011, me encontré con un escenario muy diferente. Si la década de los 90 nos encontraba poco preparados para dar la bienvenida a la RSE, la década actual nos encuentra en el extremo puesto, sugiriendo que tal vez el tiempo de la RSE ha pasado. Lo que en los 90 era una amenaza a la manera de concebir qué es la empresa y cuales son los fines que debe servir, hoy esa idea ha sido tan fatigada e invocada en vano por consultores, periodistas, dirigentes empresarios, y políticos, que sature al oyente. El concepto aparece en nuestros días como apenas una herramienta para lavarle la cara a la empresa, para maquillarla desviando la atención de investigadores y activistas sociales respecto de lo que ocurre en el patio de atrás. El sentido robusto de la RSE se ha perdido. Y la comunidad de "expertos en RSE" ha sido colonizada por los que se ocupan de las relaciones públicas, la publicidad y el marketing.
Dos casos recientes ilustran el proceso que describo. Hace un par de semanas, la iniciativa de la ONU denominada "Principios de Educación Ejecutiva Responsable" (PRME) lanza un programa de educación para prevenir y combatir a la corrupción, pensado para ser usado en las aulas de las escuelas de negocios (ver aquí). PRME es una loable iniciativa, en vigencia desde 2006, destinada a estimular en las aulas universitarias conceptos como la sustentabilidad y el liderazgo responsable. Y el diseño de paquete de herramientas educativas para educar a líderes empresarios en los riesgos de la corrupción y la necesidad de la lucha contra la corrupción es digno de elogios. El problema es en manos de quien se ha puesto la iniciativa. Pues en su interesante y atractivo sitio web, se declara que este conjunto de herramientas es "patrocinado por Siemens como parte de su Iniciativa para Integridad". Sí! Leyó bien! Siemens, la corporación empresaria responsable de haber pagado los mayores sobornos en la historia del soborno en la humanidad, le enseña a los alumnos de las escuelas de negocios sobre los riesgos de la corrupción!!! Los ejecutivos de Siemens, en este caso los involucrados en el escándalo de pago de sobornos al gobierno argentino en el denominado "Proyecto DNI" (ver aquí, aquí, y aquí), son los que instruyen a las escuelas de negocios sobre transparencia, gobernabilidad, y herramientas para el control de la corrupción. Así como se lee...
Mientras tanto, el segundo caso está todavía en marcha. Ayer amanecimos con un titular impactante. Bernardo Kliksberg declara que "Buenos Aires será la capital mundial de la responsabilidad social empresaria" (el link aquí). Se trata del denominado "Primer Congreso Internacional de Responsabilidad Social Empresaria", organizado en conjunto por la UBA y la Universidad Tecnológica Nacional y que se viene desarrollando desde este lunes y hasta hoy en el Holiday Inn de Ciudad Evita, en La Matanza. Con la presencia estelar de Amartya Sen, más las llegadas de los ex-presidentes Lula y Felipe Gonzalez, el evento es organizado por la Fundación Observatorio de Responsabilidad Social presidido por Alessandra Minnicelli (sí, la esposa de De Vido!!). El evento ha sido cubierto extensamente por Página 12 (ver aquí), lo cual en principio debería ser un buena noticia, dado que ese diario no se ha interesado demasiado en temas relacionados con la RSE. Que la apertura del evento quede en manos del gobernador Scioli y del intendente Espinosa (además del Decano Barbieri) marca el tono de esta conferencia. En el clip de aquí arriba se puede ver al Ministro De Vido, hablando poco de responsabilidad social empresaria pero mucho de Gioja - tal vez el nombre menos emparentado con la RSE entre los dirigentes políticos argentinos por su asociación con Barrick Gold y su rol en desarticular la Ley de Glaciares - y al matrimonio Kirchner, a quienes De Vido agradece por ser los gestores, los que han permitido la realización de este evento. Si uno revisa las fotos y el temario de los paneles advierte que los disertantes sobre RSE no son precisamente especialistas en la materia (ver, por ejemplo, el plenario “Políticas Públicas en el marco del modelo de desarrollo económico con inclusión social”, en el que estuvieron De Vido,  Abal Medina, Manzur, Pichetto, los gobernadores Sapag y Zamora, y el intendente de Florencio Varela, Julio Pereyra). Y si faltaba algo más, mire como se conforma el panel de “Finanzas Éticas, una Banca Sustentable”: Marangoni del Banco Provincia, Straface de Cippec, Cerolini del Banco Macro, y los candidatos del Frente Para la Victoria en las elecciones de la semana próxima Paula Español y Carlos Heller (ver aquí).

Usos y abusos de la RSE. Una pena (o dos).